El día de San Antón, detrás del mercadona de la Fuenfresca, hice una hoguera con unos amigos de atletismo, nosotros la saltábamos, y con unos palés que nos encontramos, los echábamos al fuego y los usamos para apoyarnos al saltar. La hoguera de los niños fue mas grande que la de los padres. Los niños, nos hicimos una hoguera pequeña para comer nubes, que hicimos de todo con ellas menos comérnoslas... También, con las brasas, jugamos a golf, a hockey, y a tirarlas hacia arriba rápidamente para no quemarnos, y les dabamos con un palo. Los niños, con los palés nos montamos como un sofá para estar tumbados mientras nos comíamos el cocadillo de salchichas, chorizo, morcilla... luego al acabar de cenar, echamos todo a la hoguera de los niños y estuvimos saltando un rato. También hicimos muchas fotos.
Carlos Eced
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